soy

Separación

  Un día, te levantas, no hay motivo aparente o son tan pequeños que no se pueden cuantificar. Átomo a átomo, día a día, año tras año, una herida que, al desconocer su existencia o al ignorarla, ha ido creciendo y supurando. Es fácil no querer, menos comprometido. ¿Se agota el amor? ¿Qué queda? ¿Otro amor? ¿Hastío? O temas tan profundos que ahogan, quitan la respiración. Hasta aquí, ni un paso más contigo, bifurcación de caminos. Mi camino no es tu camino, ya no. Moralmente, ¿qué mierda de moral?, la vida es corta, o muy, muy larga. En esos besos que te reconfortaban, ahora no encuentras nada, eso en el mejor de los caso. Acaba todo, incluida la vida... ¿Qué lleva a dar el primer paso? ¿Qué hay de definitivo en el amor? Sin agua las plantas mueren, no todas, no todas. Se queda uno fuera de juego, en estos asuntos no hay fairplay que valga. Lo de las mujeres y los niños primero, en este caso no sirve. Lo de los ancianos, ya que hablamos de ello, tampoco lo he entendido nunca, porque los ancianos antes que los "hombre". Si son ancianos... Nueva vida, nuevos miedos, nuevos encuentros o encuentros dejados atrás hace mucho tiempo. ¿Quieres comer mi corazón? Se necesita el latir de un corazón para vivir.

esto...

Es de fuego este interior que juega al despiste y me lleva, cual peonza, de un lado para otro, sin rumbo fijo, a expensas de las irreguralidades del camino. Un golpe y a otra cosa, obviemos lo de la mariposa. Plan de futuro: ¿hay futuro?

Algo ocurre cuando te quieres poner trascendente, y no sale, no hay manera. Eso de la vida y vivir es como un café con leche, y estando como estamos no se precisa mayor explicación.

Vendo un aparato que atrapa la vida, para comprar otro aparato que atrapa la vida, así es la vida, comprar y vender, ofrecer y que te ofrezcan. No soy todos los días lo mismo, supongo que ya lo sabía, pero no deja de sorprenderme.

Incluso hay que prescindir de las palabras y besarse más, acariciarse más, follarse más.

 

un día de estos

  Un día dejaré de soñar, un solo día. Intentar ver este mundo con los ojos cansados, sin necesidad de ver. Ese desencanto que se acomoda en la rutina, en el desasosiego. Inconsciente de lo sucedido, un día, falta un día o sobra ¿Quién pone velas a los santos? ¿Las beatas? ¿Los faltos de fe? ¿Los nacidos para buscar y no encontrar? Mantengo soliloquios, me convenzo de que no voy a caer nuevamente en lo mismo, que no cogeré el teléfono o contestare los mails. En esta estupidez que me sumerjo crezco, me hago persona. Una respuesta, que no busco, y ser feliz. No hace mucho y es una eternidad, nieva en Canfranc, luce el sol en Zaragoza. Yo estoy aquí, mañana no. Al encuentro sin mirar atrás: Todo lo que soy cabe en la palma de tu mano. Sopla amor y me desvaneceré. Si pudiera péndulo sería o reloj o tiempo pasado. Si pudiera nada sería o tan poca cosa que pereciese imperceptible. Un día de estos encuentro, ya lo sabía, que no hay más refugio que tú. Un ventana, una puerta, una silla, un hogar. Ansío un lugar, un pequeño espacio en el que refugiarnos sabiendo que un leve instante después el río vuelve a su cauce, y las cómplices miradas hay que compartirlas con ese amor que creció en tu interior.

Un día de estos te beso con tanta distancia que nuestros corazones abrasen.  

cuatro años

  Cuatro años, tiempo que discurre. Esos ojos que me dejan sin argumentos, que me convierten en el títere de sus caprichos. Cuatro años, sin darse cuenta lo es todo, un día de estos he de coger al toro por los cuernos, hoy no.

Siempre espero una respuesta, no es una costumbre, es una manía. Esperar muestra mi lado adolescente, cuando más cerca estoy de la estupidez. No es miedo al ridículo, eso lo deje atrás hace mucho tiempo, es otra cosa... otros miedos.

Hoy Paula es la protagonista, sus carreras por la casa, el ruido de los zapatos de tacón, esa pose pija con la que se pinta los labios o los ojos, ese pase de modelo que no muestra y deleita. La sesión fotográfica a la que me somete, con múltiples poses, que sólo termina cuando ella decide.

Con todo mi amor.

de partida

  Hoy es hoy, el primer paso hay que darlo, para poder caminar, el último lo da la vida. Hoy termina y empieza, de nuevo, lo que en verdad solamente acaba con la tumba. Estoy en ese punto en el que la desesperación y la esperanza se cruzan, en ese cruce de caminos que es el arte, se me puede llamar presuntuoso, no me molesta. El amor, tu amor es la base de todo, no se escribe esto por quedar bonito, es la realidad, en la zozobra, en este desierto en el que camino, sólo tu agua me permite continuar. Doy poco y lo poco que doy se pierde en mi ego.

Un cuento: Siempre que llovía miraba desde lo alto del cerro, el agua cayendo sobre su cuerpo, no lo he dicho: su desnudo cuerpo. Una mañana, un tres de abril... la lluvia le impedía ver, solamente podía sentir, entonces los tres que eran, fueron uno y comprendió que sin ellos la vida no podía continuar, pero ellos, los otros dos que eran él, siempre habían estado allí.

Un chiste: En tu coño, me sonrojo

resaca

 

Queda un poso de desazón y tristeza en esto de vivir, hoy lo estoy, mejor decir ahora lo estoy.

Paula va ha cumplir cuatro años, algo ha de cambiarse, tirar a la basura aquellos lastres que sin saber como, no es cuestión de psicoanálisis, tan mal no creo estar, están rondando por ahí. Este espejo me da una imagen que no siempre se corresponde con lo que creo ser. No puedo quejarme, no debo quejarme, he hecho lo que he querido, cuando he podido y con gentes que están muy enraizadas en mi corazón. No lamento nada, si acaso pequeñas cosas, algunas que me hubiera gustado no hacer y otras, dedicarle mas tiempo a Luisa y Paula, que espero hacer de ahora en adelante. Es una jodienda esto del arte, puedes intentar luchar contra las imágenes que me asaltan, pero de momento acaban venciendo. Después de estrenar siempre hay algo que se rompe en mi interior y tarda en cicatrizar. Me duele molestarte por que te quiero, y eres importante en mi vida, muy importante, pero no quiero pasarlo mal por ello.

Un segundo antes pensó: No sé si es lo adecuado, dos segundos después ya no tenía remedio. Yo no voy a tirarme por la ventana o desde un puente. Igual el teatro no es el vehiculo apropiado para mostrar mis inquietudes... seguiré  buscando. Puede que encuentre, puede que no. Siempre queda el amor hacia los tuyos, y de ellos hacia mi.

"Si la vida es una mierda, habrá que disfrutarla"

o-g-h

 

Me voy, mejor nos vamos. Tarde para los lamentos: Dos amores, dos claveles, un crepúsculo entre tinieblas, dos amores, dos claveles se rompe el tallo se quiebra... Noche de pesadillas y descubrimientos, en el hogar de los niños os encontré y de paso me encontré a mí mismo, no como persona, como personaje... La distancia... el encuentro. Hamlet sintiendo amor, creciendo amor... Bari - Huesca - Zaragoza, la distancia es un recuerdo, algo confuso y siempre caótico. Tus (las) manos... Un día dejaré de buscar, hoy no es ese día.

OfeliA

     Gertrudis

       B a

             n

               t

                 x

                 HamLet

                      u

                      i

                      s

Hasta aquí esta historia.

 

disney-chocolate-tú-yo-los demás.

 

cicatrices

Tengo miedo a caer, como todo el mundo:

Es tiempo de la absolución de los pecados, no del perdón, de la absolución. Perdonar es absolutamente prescindible, no hay que preocuparse por olvidar, ¿es el olvido, una forma de perdón? No son las causas, son los resultados. No sé si se me entiende, no pretendo ocultarme, ni justificar ante ti o ante nadie mis actos. Equivocarse forma parte de todas las historias, de la de todos.

 Comienzo delante de una piedra que lanzo al aire y por un instante me olvido de ella, de la piedra. Ese instante tiene algo premonitorio, cuando crees que algo maravilloso va a suceder, cuando el milagro se puede palpar, oler, presentir, la piedra sucumbe a la gravedad, golpeando la cabeza del niño que era entonces yo. Hospital y hazaña cumplida, tres punto de sutura... la cicatrices, de niño son como medallas, aquella piedra me convirtió de golpe, en general, capitán o sargento.

Los problemas viene de golpe, caen como hojas de otoño, incertidumbres que congelan el alma. Ya no tengo nada que pudiese querer. No es tan gélida tu mirada, como mi deseo. En tus alas me refugio. Las cicatrices que me hacen ser lo que soy, no siempre se pueden ver.

algo hermoso

  Dime algo hermoso que me permita soñar, ahora mismo, en este instante de tedio. Algo tan bello, tan prometedor como unas ingles recién depiladas. Perderme en el bello púbico de tu entrepierna, algo hermoso que excite mis sentidos. Alerta quedo, como un adolescente enamorado... una palabras, un gesto... una promesa que sin saberlo se escape, que la pueda cazar al vuelo, aunque me equivoque, soñarte. Dentro de este calor me cobijo, cimbrea el cuerpo, arrogante sumisa. No tengo nada contra el muro, la mesa el suelo... pero... una cama... (será la edad) Me muestro dispuesto. Y si...

Hazme algo hermoso que me impida soñar.

Un cuento

"Cuando te he encuentro, ya no busco" Hay veces que mirando no acabo de ver nada. "Demasiado viejo para el r'n'roll, demasiado joven para morir"

Un cuento: Pili se levanta, no es temprano, pero tampoco es tarde, no come, no se viste, no se ducha ni peina, se levanta de la cama, se dirige al baño y sobre el lavabo vomita sangre. El tiempo se acaba, se escapa la vida. Vuelve a la cama, no puede dormir, se vuelve a levantar, de nuevo al baño, una nueva bocanada de vida se le escapa... se mira en el espejo, lo que ve ya no le recuerda a lo que fue. Sola... Pili ya no come, no bebe... espera la llegada, cuanto antes mejor. Suena el móvil, no lo coge, suena, suena. Se sienta en el sofá, enciende la tele, la apaga, la enciende, la apaga, un juego que parece interminable. Regresa al baño, de nuevo en el sofá, otra vez el móvil. Falta poco, esa certeza la mantiene cuerda. Después de todo, la vida no es tan importante. Siente frío, la desnudez le pesa. Se levanta, se viste, se peina, se huele, se desviste, se ducha, se peina, se viste, se mira en el espejo, a veces la vida...

wii

  Me entristece, angustia, inunda mis sentimientos, esa inexplicable necesidad de vivir a toda costa, por encima de todo. No acabo de asumir los errores de ¿Dios?. Me gustaría llorar, desbordarme y salir de la congoja que me produce esta visión, lo explicito lo dejo para aquellos que todo lo saben y se conforman con eso. Escribir entristece mi alma, pero es lo que sale, no creo premeditarlo, tiene un mucho de espontáneo.

Hoy, no hay que acostumbrarse, homenajean a una mujer en Polonia que salvo a mas de dos mil niños de una muerte segura en el Ghetto de Varsovia. Por ella merece la pena vivir, en ella merece la pena la vida.

En la sala Mozart, cientos de niños escuchan Carmen de Bizet, niños ¿normales? En su mayoría, entre ellos unos pocos, que difícilmente pueden controlar sus cuerpos, que una silla de ruedas es su hogar, niños que posiblemente nadie hubiese salvado en el Ghetto de Varsovia, ni en ningún Ghetto de los que nos rodean.

Difícil al vida... amarga la existencia.

Feliz viendo crecer a mi hija... todo es un contrasentido.

Cuando habrá los ojos sabré el lugar que me ha de acoger.

Mi hogar es mi refugio y mi sustento.

PD: (Una frivolidad) La Nintendo WII es una pasada.

Alameda II

  En tus postreras lágrimas, madre, no encuentro consuelo. Los últimos besos, no son tus besos, ni las caricias las tuyas. Salido de tu coño, a él quise volver: de hombre a mujer. Sin sol la nieve no funde, los cuerpos buscan calor, se buscan, no siempre se encuentran. Cauteriza la herida. Tiempo de gangrena, carrera en la media, pechos que me alimentaron y dieron la vida. En tu culo, madre, mi tío iza su bandera. En estas aguas, revueltas, no encuentro retorno, perdí el camino, la senda. Tras la madeja de lana, pesado traje mojado. ¿Quién me amortajara, madre? Fui a tu encuentro, encontré terreno yermo y quemado. Sin descendencia madre, ¿quién reinara por mí?  

Alameda

 

Muertos y resucitados, encuentros o desencuentros... un instante para ser feliz, una caricia, tus manos que hablan, tus ojos yendo más allá de los besos, un abrazo que habla de amor, de necesidad, de cuerpos que se citan, que se esperan allende la muerte, eternidades, amores que no marchitan. Cuando hablan tus manos mi cuerpo, mi mente se conmueven. Dejemos el sexo para después, para más tarde, ahora un suspiro, una caricia, un ligero roce de los labios... Amores, de tanto amor perdido nacieron los mares, de ellos surgió la vida, el ciclo se repite. Sólo el deseo nos ata, libre de ataduras el amor es puro, en su pureza tus ojos... Triste la vida para el que insiste en pedir... da y te recibiré. Amores muchos, amor uno.

El personaje, no es la persona, se pueden confundir, siguen caminos diferentes, no convergen, distanciamiento. Ya lo dijo este Alemán, por un momento... un instante... una luz... un sueño... Ha de enterrarse en sagrado a aquel que atenta contra su propia vida...

tarde

Es tarde, hora de estar en la cama, pero... siempre un pero, una confusión, entre lo deseado y lo obtenido. Es triste mirarse y no encontrar más respuesta que la nada, que el camino equivocado. Una piedra lanzada una vez, al azar, sin prever las consecuencias, sin atemorizarse por lo que puede llegar a provocar esa acción, puede que nada, puede que todo. Es irresponsable el miedo, el miedo a recoger más de lo que das y exigir que te den. Muero un poco en cada cosa que hago o digo, así es el discurrir de la vida, morir un poco cada día. Hoy ha muerto, algo a nacido, ese continuo batallar, ahora, me agota. Si te escondes cuando antes no lo hacías, algo falla y puestos a buscar culpables, levanto la mano. No es por solidaridad, es egoísmo, el querer asumirlo todo, para después poder quejarme. Déjame en un lugar oscuro, hoy quisiera lágrimas en mis ojos, hoy quisiera ir, regresar cuando el viento me recuerde de donde soy y ha que lugar pertenezco. Barco sin rumbo, con miedo. En mitad del caos mi nausea.

Hasta mañana... ...es tarde y no tengo nada que deciros, tal vez excusarme por mi existencia. Pero es lo que hay.

 

la noche del silencio

Luna: ¿Ahora qué?

Plenilunio: Nada, ahora nada, ahora silencio, suplica. Alma enmohecida que lucha por salir. Ahora, tú eres tú y yo me voy, parto para no regresar, marcho, por que tengo una familia que no eres tú, pues no eres mis hijos, tus hijos, no son mis hijos.

Ahora abandono, si quieres llamarlo así, no tiene importancia, el como llamarlo no importa, carece de valor, de esperanza.

Nunca he querido estar aquí, en tu regazo amarrado, la dicha, nunca pertenece a los derrotados.

¿Y tu amor? Preguntaras, ¿para qué ha servido tu amor? Ha servido para alimentar mi odio, día tras día, años tras año, no a ti, no a tus hijos, si no a todo lo que representas, a aquello que simbolizas, ese odio que me ha mantenido vivo, que me ha dado fuerzas para continuar. He sido tu simiente y tu amante, fuego y agua, he calmado tu sed, sabiendo que tú no podías saciar la mía.

Fui arrancado de mi esposa y mis hijos, por ser quien soy, aún en el caso de no haberlo querido ser jamás,  lo soy, lo sé. Nacido de mi padre, de mis antepasados, así, mis hijos son hijos míos y yo soy su padre, así tus hijos son tuyos, pero no míos. Puesto que fui empujado a tu lecho y se me obligo a engendrarte. He sido moneda de cambio, bálsamo para las heridas.

Recuerdo permanente en mi pueblo, mi pueblo aplastado, humillado, yo rehén de su humillación, yo rehén del silencio de mi pueblo.

En esta cárcel de oro, no lo negaré: he sido huésped y prisionero, príncipe y  esclavo. He yacido contigo, no hay amor en el sexo, y si lo hubo, reniego de él.

He cuidado de tus hijos como el mejor de tus siervos, no como el mejor de los padres, he fornicado contigo como el mejor de los amantes, no como el mejor de los esposos.

¿Ahora qué? Preguntas, ahora vuelvo a casa. No busco rehenes que perpetúen la opresión, que bajo mi yugo se someta a tu pueblo.

He aprendido a perdonar, o a creer en el perdón. En el silencio de mis noches, he sentido tu amor, he amado tu amor, no a ti, he creído que tú no eras víctima ni opresor, una pieza más en el castillo de mis odios.

No se satisface a un hombre con una mujer hermosa, con una perra enamorada, tu amor, no justifica mis muertos, el amor no cura las heridas. Un hombre no ama cuando su corazón esta lejos, del abrigo de su hogar, con su esposa y sus hijos.

Quisiera no provocarte dolor, pero no puedo evitarlo. Al decirte estas palabras el dolor aflora, como un tronco flota en las embravecidas aguas de un océano.

El dolor es inevitable e inexcusable, no he de justificar aquello que no necesita justificación.

Quedarás aquí con tus muerto y tus hijos, reinarás en esta tierra que ha visto mi humillación, no quiero aquello que es tuyo, que por sangre te pertenece a ti, como pertenecerá a tus hijos.

Aspirar a que no siembres en ellos el odio, el despecho, un ansia irrefrenable de venganza hacia mí es una quimera, un imposible.

Tienen derecho a vivir y a morir en libertad, y tú tienes la obligación de transmitirles ese derecho.

No voy a juzgarte, este es el tiempo de regresar a casa, al hogar. Ni como vencedor, ni como vencido: como Ángel exterminador de las plagas que han asolado mis tierras y mis riquezas. Vuelvo como padre y como hombre, como hombre que no ha de derramar más sangre de la que ha de ser derramada.

Luna: ¿Qué sangre ha de derramarse?

Plenilunio: Toda la que sea necesaria para fortalecer la paz en los tiempos venideros, aquella que en su interior almacene la simiente del odio y de la venganza.

Luna: Yo te amo

Plenilunio: Ahora me amas, ¿Cuánto tardarás en transformar ese amor en odio? ¿Cuánto en envenenar la sangre de tus hijos para limpiar la afrenta, a la que ahora crees que te someto?

Luna: No creo nada.

Plenilunio: Lo creerás.

Luna: No te has ido, y comienzo a odiarte.

Plenilunio: Tu odio es mi odio.

Luna: ¿Previenes el futuro odio con mi sangre?

Plenilunio: Y con la de tus hijos.

(Oscuro)

 

Fantasmas

Es temprano, hay poca lucidez y algo de confusión. ¿Crece el personaje o decrece la persona? No hay busqueda sin desencuentro, es un espejo que no siempre devuelve lo que queremos ver. Un sms, en eso se traduce ahora lo que hay que decirse, brevedad y eliminación, lo justo para entenderse o para confundirse. Cuando llego a casa soy alguien, ese ser que reconozco y acierto a comprender. No se bien de donde vienen las imagenes que me inundan y fuerzan a seguir esa, por momentos agobiante, necesidad de decir cosas, de ponerlas ante los ojos ajenos. Es temprano, y no todas las palabras estan en su sitio, ni ocupan su lugar adecuado. Deformo, a veces el deseo de los demás e intento convertilo en el mio, en mi deseo prevaleciendo... No hay ahogo en todo esto, si acaso fantasmas, que me indican lo acertado o equivocado de mis pretensiones. Si pudiese elegir: la MUERTE, no de la vida, demasiados compromisos que te unen a ella, esa muerte de lo que llega sin ser invitada y me convierte en el titere de mi no consciente.

 

empezar

Es desde luego un tiempo de zozobra y pesadez, me gustaría, a quién no, parar el mundo y bajarme un par de días, este vértigo me tiene atrapado y no me deja respirar, sacar la cabeza y dejar de sentirme avestruz. Paula se ha convertido en una sirena, miro embobado y ese momento es el momento en el que todo se detiene y no quedan pensamientos, deseos ni nada, sólo mi niña y Luisa. Siempre con prisas, ir puede, llegar no creo, nunca se llega a nada. Pequeñas satisfacciones, o derrotas, no necesariamente con alternancia. Un poco de todo, un mucho de nada. Afortunadamente no me siento pesimista, sino menudo lastre la vida. Estar cansado es uno de los peores estados que se enquistan en nosotros. Física y mentalmente. Pequeña es la salida, y sin embargo me llama la metáfora, el esconder lo que digo. Siempre ha sido así, no se puede cambiar, al menos lo digo, lo escribo y alejo los fantasmas que a veces me persiguen.